La muerte del intérprete cubano de 90 años la comunicó su familia en un sentido comunicado. “Nosotros estamos destruidos como familia porque Pipo era y seguirá siendo para nosotros junto a nuestra madre un orgullo de lo que significa la familia con los buenos principios morales y era un excelente padre, tanto para Marita como para mí, para su nieta, que es mi hija Taniusha Mollet Capote, para mi sobrino, que es el hijo de mi hermana Marita, y para mis nietos Mia Tatiana Casenave Mollet, Emilio Alexander Casenave Mollet, Leyla Spagna Casenave Mollet”, escribió su hija Tatiana Capote, también reconocida artista venezolana. Conocido cariñosamente por el entorno artístico como Papá Julio, destacó en sus comienzos en su Cuba natal para, posteriormente, triunfar en la televisión venezolana en su época dorada, en la que debutó con la exitosa telenovela María Mercé, La Chinita, protagonizada por Lila Morillo. A partir de ese momento, Venezuela le adoptó y empezó a participar en prestigiosas series como La pasionaria, Lucecita, Topacio y Leonela, entre las más clásicas, hasta también las más recientes, de comienzos del 2000, como es el caso de Secreto de amor, Soñar no cuesta nada y Olvidarte jamás. Sus últimos años de retiro fueron en Florida donde siempre estuvo arropado por los suyos. El primer actor de radio, teatro, cine y televisión estuvo casado con Leyla Abdel de Capote, con quien tuvo a sus dos hijas, Marita y Tatiana. 63 años de feliz matrimonio que consolidaron una familia unida que hoy le despide con todo el amor. Y con ellos su público de tantas décadas a quienes regaló personajes inolvidables que hoy ya son historia viva de la pantalla chica. Primeras estrellas de la escena venezolana como Caridad Canelón o Alba Roversi le han despedido junto a sus miles de fans en las redes. Descanse en paz. Fuente: People en español.