El ecuatoriano Marlon Chito Vera es un león en el octágono de la Ultimate Fighting Championship (UFC), pero fuera de este demuestra su lado humano y jocoso.
En una extensa entrevista en el pódcast Champions corner, del méxicano Brandon Moreno, también luchador de las artes marciales, Chito, de 30 años y figura en la división de peso gallo, reveló cómo se prepara y los beneficios afrodisíacos que tiene el encebollado ecuatoriano.
Luego de hablar de varios temas, entre estos la educación de los niños, inició una ronda de preguntas que enviaron los internautas del programa que se transmitió por YouTube.
Y la primera inquietud que respondió Chito, nacido en Chone (Manabí), fue: “¿Con qué se come el encebollado: con chifle o pan?”; y sonriendo respondió: “Con ambos”.
El popular luchador de artes marciales nacido en Chone defendió a capa y escapada el manjar ecuatoriano. @chitoveraUFC alaga nuestro encebollado.#chitovera #encebollado #Ecuador #redecuador pic.twitter.com/zYCubE7GMF
— Red Ecuador Medios (@RedEcuadorMedio) October 3, 2023
Entre risas, Moreno, oriundo de Tijuana y luchador en la categoría de peso mosca, le dijo: “No mames. ¿Me puedes explicar qué es eso?”.
Vera, fiel a su estilo de hombre canchero, de barrio, comentó: “El encebollado es una sopa, brother. Mi mujer hace uno para chuparse los dedos. Cuando estén por California (estado donde vive Chito) me avisan para decirle a mi esposa que haga este platillo para que degusten. Es una sopa de albacora, rica”.
Rápidamente, Moreno, de 29 años, le interrumpe y consulta: “Aguante. No mames. ¿Qué es la albacora, pues?”.
Sonríe Chito y comenta: “Es un pescado. Se lo mata y cocina de una forma simple, con cinco o diez ingredientes, y queda como una sopita caliente”.
“Se come con un cachito (pan mexicano), pero hay que remojarlo en la sopa. Es rico. O también se le pone el chifle o verde (el plátano), que es cortado como una moneda de 50 centavos, lo fríes en aceite hirviendo y queda crocantito, monstruoso, rico”, argumentó Vera.
“Cuando tu comes la sopita, el pescado, la yuca y el chifle, y sientes que todo eso se derrite en tu boca, te hace subir la testosterona y pegas tres palos, sin sacar”, concluyó. (D)
