“Black Friday” significa “Viernes Negro” en español y el término nace en Estados Unidos, específicamente en Filadelfia, en la década de 1960, cuando los agentes de policía comenzaron a utilizar dicha frase para describir el caos que se producía cuando un gran número de turistas llegaban a la ciudad para comenzar sus compras navideñas y, en algunos años, asistir al partido anual
de fútbol entre el ejército y la marina del sábado.
Las tiendas no comenzaban la temporada de compras navideñas hasta después del Día de Acción de Gracias (que se celebra el cuarto jueves de noviembre). Por lo tanto, cuando se abrían las compuertas, se convertía en un total desastre.
Las grandes multitudes crearon un dolor de cabeza para la policía, que trabajó en turnos más largos de lo habitual para lidiar con embotellamientos, accidentes, robos y otros problemas.
Con el pasar del tiempo, este evento se extendió en todo el mundo y en Black Friday las cadenas de tiendas tradicionalmente ofrecen ofertas especiales limitadas para una amplia variedad de productos en un esfuerzo por atraer a los compradores.
